el hotel era perfecto para ir con niños. la habitación para cuatro personas era muy cómoda y limpia. el parque infantil con el mini tren era muy bonito y entretenido para los niños. el entorno de Suiza era maravilloso y la comunicación con transporte público era perfecta.

el personal no fue amable, especialmente el día que llegamos. hubo confusión sobre el pago y nos trataron mal al pedir botellas de agua y hielo.

La habitación era espaciosa y cómoda, con suficiente espacio para guardar nuestras pertenencias. Además, la ducha tenía buena presión de agua y disponía de artículos de higiene. También disfruté del desayuno buffet, ya que tenía una variedad de opciones para escoger y me permitió empezar el día de forma satisfactoria. Por otro lado, el hotel contaba con diferentes zonas como una terraza, una cafetería y una sala de lectura, lo cual hizo mi estancia más agradable.

Tuve algunos inconvenientes durante mi estadía. En primer lugar, la camarera que nos atendió no fue muy amable, a diferencia del resto del personal del hotel.

El lugar es fantástico, el personal competente y excelente.

Desayunos deliciosos y comida buenísima.

Excelente para familias. Zona residencial tranquila. Personal amable. Habitación familiar amplia y limpia. Trato especial a los niños. Increíble zona de juegos exterior. Buena comunicación con transporte público. Desayuno suficiente. Recomendado totalmente.

Las camas eran súper cómodas, y había un balcón de madera, servicio de tetera/cafetera y una cocina en la habitación. El desayuno era delicioso y tenía una buena elección de opciones. Fuimos atendidos por un personal excelente y agradable...

La habitación para cuatro personas era súper cómoda y espaciosa. Además, justo detrás hay un parque infantil con un pequeño tren, perfecto para los niños. La ubicación del hotel es excelente, con parada de autobús en frente que te lleva a la estación de tren de Lucerna. ¡Nos encantó nuestra estancia en Suiza!

Lo único que podríamos pedir es que hubiera más opciones de diversión para jóvenes fiesteros como nosotros. Sería genial tener una zona de ocio nocturno con música y actividades para disfrutar aún más nuestras vacaciones.

El Hotel & Restaurante Charnsmatt en Rothenburg es perfecto para ir con niños. Las habitaciones son cómodas y espaciosas, y hay un parque infantil cercano. El personal es amable y el restaurante tiene una deliciosa cocina. Además, el hotel cuenta con un amplio parking exterior.

Me sentí muy a gusto, no tengo ninguna queja en absoluto.

Recomendado! Habitaciones amplias y comodas, desayuno buffet variado. Personal amable y dedicado, especialmente Luisa. Cocina fenomenal. Buena ubicación para visitar Lucerna. 🌟

Una gente muy profesional y muy amable.

Las habitaciones con un baño estupendo, un dormitorio y también una cama doble. Todos los servicios eran muy buenos.

el hotel está muy bien en relación calidad-precio y para los niños está genial por todo lo que tienen para jugar. Además, las vistas a las montañas son espectaculares. Para mi, lo mejor de todo.

No había aire acondicionado en la habitación.

Las habitaciones rústicas son simplemente encantadoras y acogedoras. Me sentí como en casa con la hermosa vista del valle y el monte Pilatus desde mi balcón. La cama era cómoda y el baño espacioso. Además, el ambiente tranquilo y el escritorio en la habitación fueron perfectos para relajarme y trabajar durante mi estadía.

No me gustó que algunas habitaciones no tuvieran balcón. Pero entiendo que esto es solo mi opinión subjetiva y otros huéspedes podrían disfrutar igualmente de su estancia.

Las habitaciones rústicas son acogedoras y tienen unas vistas impresionantes del valle o del Monte Pilatus. Me encantó despertar y disfrutar de la belleza de los paisajes desde la comodidad de mi habitación. Además, las habitaciones cuentan con televisión y baño espacioso, lo que hizo mi estancia aún más cómoda. Como huésped, me sentí realmente relajado y lleno de energía positiva gracias a estas comodidades.

Aunque la mayoría de las habitaciones tienen un balcón, la que me asignaron no lo tenía. Personalmente, me hubiera encantado tener un balcón para disfrutar aún más de las vistas y relajarme al aire libre.

Fuimos con los colegas y nos la pasamos en grande. Primero, visitamos Lucerna, una ciudad a solo 10 minutos en auto del hotel. Las vistas a las montañas eran alucinantes, ¡fotazas aseguradas! Además, la habitación tenía camas súper cómodas y había una sala de juegos con tobogán y todo para los que somos niños grandes. Y el desayuno buffet estaba brutal, con todas las cosas ricas para cargar energía antes de explorar la zona.

Lo único que nos faltó fue un poco más de fiesta y diversión. El hotel es súper chulo y todo, pero nos hubiera encantado que hubiera actividades nocturnas o algún tipo de entretenimiento para jóvenes que buscamos marcha.

Nuestra habitación en el último piso era una buhardilla encantadora, con vistas a las montañas nevadas. A pesar de que el ascensor solo llegaba a la planta inferior, no fue un problema para nosotros. El trato del personal del hotel fue excepcional, siempre amable y servicial. Además, pudimos disfrutar del parking privado gratuito, lo cual fue muy conveniente.

Nos hubiera gustado tener aire acondicionado en nuestra habitación, ya que en esos días de calor extremo resultaba difícil estar allí. También nos pareció que el desayuno era un poco limitado en variedad.

Nos la pasamos de maravilla visitando Lucerna y Zurich. El hotel estaba super bien ubicado y el autobús nos llevaba rápido a todos lados. Las habitaciones eran cómodas y limpias, y las vistas a las montañas eran alucinantes. El desayuno estaba bien rico y nos ponía las pilas para el día. ¡La pasamos bomba!

Lo único que nos faltó fue alguna actividad nocturna o una zona de fiesta para jóvenes. Nos hubiera encantado tener un lugar donde salir a bailar y conocer a más gente de nuestra edad.